Terapia para la ansiedad en adultos

La mayoría de las personas experimentará ansiedad en algún momento de su vida, pues este sentimiento de inquietud y temor tiene una función adaptativa que nos ayuda a actuar con mayor rapidez en situaciones límite. Sin embargo, cuando esta sensación se extiende en el tiempo e impide el funcionamiento del día a día, podemos estar ante un trastorno por ansiedad, en cuyo caso será necesaria una terapia para la ansiedad en adultos.

¿Qué es la ansiedad?

La ansiedad es un sentimiento de inquietud desproporcionado en comparación con el peligro real, muy difícil de controlar y cuyos síntomas pueden alargarse en el tiempo. Sus síntomas pueden surgir en cualquier momento de la vida, tanto en la infancia o adolescencia como en la adultez.

Debido a la fuerza de las emociones y pensamientos que acompañan a esta enfermedad, puede provocar que la persona afectada evite determinados lugares o situaciones. No obstante, estos síntomas variarán según el tipo de ansiedad que se padezca. Además, debido a que la patología no se suele abordar a tiempo, a menudo requiere de tratamiento, de modo que la terapia para la ansiedad en adultos es una respuesta frecuente para esta enfermedad.

Respecto a las causas de la ansiedad, no está del todo claro qué produce esta patología. Sin embargo, se encuentra gran relación con acontecimientos traumáticos, rasgos heredados e incluso otros problemas médicos.

Tipos de trastornos por ansiedad 

Cuando los síntomas asociados a la ansiedad pasan a ser más significativos que la situación que los provocó y empiezan a obstaculizar un desarrollo adecuado de tu rutina, podemos estar ante un trastorno de ansiedad. Si bien estas enfermedades mentales pueden ser muy debilitantes, debes saber que es posible controlarlas con una terapia para la ansiedad en adultos adecuada.

Trastorno de ansiedad generalizada

Este trastorno se caracteriza por una preocupación constante y excesiva por eventos, circunstancias o actividades comunes a la rutina. No obstante, la cantidad de energía que se invierte en la situación es desproporcionada, repercute negativamente en el estado de salud físico y resulta muy difícil de dominar.

Esta enfermedad es una de las más frecuentes cuando nos referimos a la ansiedad y suele estar acompañada de otras patologías como la depresión.

Trastorno de pánico

Este tipo de trastorno destaca por episodios repentinos de terror intenso y ansiedad que alcanza un nivel máximo tras unos minutos. Entre los signos que suelen acompañar esos momentos de intenso temor encontramos una sensación de catástrofe inminente, latidos rápidos, dolor en el pecho y dificultad para respirar.

Trastorno de ansiedad social 

La fobia social o trastorno de ansiedad social es una afección psicológica que implica un nivel alto de temor al rechazo social debido a sentimientos como vergüenza e inseguridad en uno mismo. De este modo, la persona que padece este trastorno puede sentirse juzgada por las otras personas.

Trastorno obsesivo-compulsivo

En esta afección mental no solo está presente la ansiedad, sino que esta deriva en pensamientos recurrentes (obsesiones) y rituales (compulsiones) para reducir la sensación de malestar. Sin embargo, y a diferencia de otras enfermedades, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) provoca, una y otra vez, las ideas intrusivas en la mente de quien lo padece. De hecho, se considera al TOC como una de las afecciones más incapacitantes.

Fobias específicas

Por otra parte, las fobias destacan por producir una notable ansiedad en la persona que la sufre cuando se expone a esta al objeto, lugar o situación que produce este gran temor. 

Desde terror a quedar atrapado (claustrofobia), temor a las arañas (aracnofobia) o al juicio ajeno (fobia social), en ocasiones las fobias pueden producir ataques de pánico.

Si bien estos han sido algunos de los trastornos más comunes, debes saber que existen multitud de afecciones relacionadas con la ansiedad, como el mutismo selectivo, el trastorno de ansiedad por separación o la ansiedad producida por las drogas.

Síntomas de la ansiedad

Los signos más comunes que sugieren la necesidad de recurrir a una terapia para ansiedad en adultos son:

  • Sensación de pánico o peligro inminente.
  • Nerviosismo, tensión o agitación.
  • Hiperventilación o respiración acelerada.
  • Aumento del ritmo cardíaco.
  • Sudoración y temblores.
  • Cansancio o debilidad.
  • Incapacidad para concentrarse.
  • Rumiación del problema actual.
  • Insomnio o dificultad para conciliar el sueño.
  • Problemas gastrointestinales.
  • Necesidad de evitar las situaciones que provocan ansiedad.

Cómo puede ayudar la LNT

La Nueva Terapia o LNT es un sistema de sanación cuántica capaz de ayudarte a recuperar el equilibrio entre cuerpo físico, mental, emocional y espiritual que tanto necesitas. Y es que en un estado de tanto desgaste como el producido por la ansiedad, la LNT te animará a reconocer el valor de tu cuerpo energético y espiritual, allí donde residen multitud de traumas que nos bloquean en el desarrollo de nuestra vida e impiden nuestra realización personal.

Sabemos que, en multitud de ocasiones, las enfermedades físicas no empiezan por sí solas y que la primera manifestación de las afecciones se da en el cuerpo energético. La LNT puede ser el complemento a la terapia para la ansiedad en adultos que necesitas.

 

Como hemos visto, sentir ansiedad de forma ocasiones forma parte de una vida normal. Sin embargo, cuando este sentimiento comienza a extenderse en el tiempo y se adueña de la capacidad para razonar y disfrutar, puede que estemos ante un trastorno por ansiedad. Si este es tu caso, recuerda que una terapia para la ansiedad en adultos adecuada te será de gran utilidad y que, con paciencia, podrás recuperarte.